lunes, 18 de agosto de 2008

Ponferrada.


Domingo 3 de agosto de 2008.

Cuándo a las 7.22h a.m. descendí del tren que me había traído al inicio del que sería “elViajeMásDuroDeMiVida” (Joder! y qué razón tenían! Claro que nadie me especificó que se referían al viaje en tren!) en Ponferrada, sin ir esposada, ni con sangre manchando mi ropa de “avezada montañera”, me dije; - Ana, si has superado el olor nauseabundo de la Sra.de la litera de abajo, (tan Sra. no sería!) los cuatrocientos “Mari, estás dormida?”, de su amiga (Sra!, cómo demonios se va a dormir -ella y yo!!- si “usté” no para de preguntarle!!?) y las cinco veces (cinco!) que se ha levantado la muchacha de la litera superior durante la noche para ir a fumar al pasillo (encendía la luz, -“es que sinó no veo”- decía la muy cándida!, movía la inestable y ruidosa escalera, ponía un pié en mi litera, abría la puerta –raagg, clack!- cerraba la puerta –raaagg, clack!- y cuando ya habías cogido otra vez el sueño…. lo mismo pero al revés! Ag!), sin descuartizar a nadie, esto está “chupao”!!.

Superada esa “dura prueba”, me dirigí a por mi credencial de peregrina (sin ella no es posible pernoctar en los albergues y joder que me la había ganado después del “peregrinaje trenero”) al albergue más cercano. Alto!, a partir de ahora, mis queridos lectores, cuándo escriba “cercano”, ustedes habrán de leer: “Cuesta arriba, a tomar por culo de lejos y apura el paso bonita, que cierran a las 8h de la mañana y no abren hasta las 11h”. OK?. Venga pues!.

Llego al Albergue. (Arf!, arf!) - Buenos días Caballero! Acabo de descender de los infiernos (y no exageraba, eh?) y vengo a por una credencial, sería usted tan amable?. – No. (Mier! ya empezamos!).- Disculpe, me dijeron….- Le dijeron mal. (Y que Viva la hospitalidad!!). Ustedes los peregrinos tienen que venir con la credencial sellada desde su localidad, quién mejor que su parroquia para dar fe que ustedes son los que dicen que son y no están buscados por la justicia (toma ya!) y….. bla- bla- bla…… quién soy yo para decir si usted es un delincuente o …. – Cómo se llama usted Caballero?. – Evaristo. – Mire Evaristo, a mi la única que me busca es Hacienda, pero cómo ni aquí estoy libre de pagar mis impuestos y nadie me había dicho nada de esto, le prometo (y yo siempre cumplo mis promesas) que en cuanto llegue a mi tierra, yo me ocupo de informar a todo aquél que haga El Camino, (tomad nota por favor) que la credencial la tienen que tramitar en su parroquia antes de llegar al punto de salida. Le parece?. – Bueno, por ésta vez….

Duro?. Joder! que se quedaron cortos los “bienIntencionados” cuando me aleccionaron sobre este viaje!!.

1 comentario:

Anónimo dijo...

De momento !!!!!!FELICIDADES AMOR¡¡¡¡¡¡, despúes, ya veremos-
Ps: la expresión "te extrañaba", te suena de algo?