Prólogo.
Salón del Automóvil. Sala de reuniones. 16 “JefesdeVenta” varones y una servidora. Tomo asiento y al rato lo hace a mi izquierda “Unodeellos”, alto, moreno, cuerpo de impresión….. -Tienes pareja?. (Y con el tacto de un rinoceronte!). Levanto la vista de las anotaciones que estaba haciendo, giro mi esbelto cuello hacia “el rinoceronte” y le respondo con voz melodiosa…... - Disculpa?. – Es que me he fijado que no llevas alianza. (Observador el muchacho). – Conozco mucha gente que está casada y no lleva alianza, - le informo como si estuviera hablando con un niño de cuatro años- y vuelvo a prestar atención a mis anotaciones. Error!, Mi interlocutor presentaba en el rostro un rasgo característico de las personas que hacen preguntas directas y esperan 1º que respondas, y 2º que lo hagas de un modo conciso, nada de circunloquios o dejarles con la duda. Insisten hasta que consiguen lo que quieren. (Casi todos están en puestos directivos, por algo será). Vale –pienso- acabemos con esto. – No, no tengo pareja. – Me lo imaginaba!!- exclama. Guardo silencio. (Vamos a darle un voto de confianza, me digo). –Algunas mujeres sois MUY exigentes. (A tomar por culo el voto!). –Queréis que seamos seguros, pero que no tengamos inconveniente en mostrar nuestras inseguridades con vosotras, que nos cuidemos, que os mimemos, que seamos cultos, que os entendamos.... (Ag! y tú no esperas lo mismo de la que ha de ser tu pareja, “trozo de cosa”!?, me daban ganas de gritarle!)…. – Me estás diciendo que tú NO eres exigente?. – le comento en un intento educado por cortar el “monólogo-pataleta”. –Ya! pero es que “vosotras”, que si el respeto, que si…. (a tomar por culo paciencia y educación!).- Madre mía! vaya ojazos!- exclamo cogiendo el móvil (último modelo, por supuesto!) que tenía frente a él en la mesa. - Es hijo tuyo?- le pregunto mirando la foto que lucía en la mega pantalla. – Si, es mío, va a hacer dos añitos el mes que viene - me responde rebosando orgullo. – Ah! Y estás con la madre de la criatura o eres “padre soltero”?. – Estoy con ella, claro. –Claro! Y dime, ¿“encontraste” a la mujer que NO era “exigente” o fuiste tú el que bajó el “nivel de exigencia” con la que iba a ser la madre de tu hijo?.
Porqué demonios las personas no piensan antes de hablar?. Y si piensan, porqué tan a menudo lo hacen de un modo peyorativo?.
1 comentario:
¡¡¡¡¡¡¡¡Ojala fuera sombrerero para quitarmelo!!!!!!!!!!!
Es un comentario muy oportuno despue de haber tenido la desgracia de conocer "LA ULTIMA COZ DE UN animal llamado antonio burgos en el abc de hoy.
me siento muy orgulloso de ti, y un poco menos de los de mi genero.
No son PRE-JUICIOS, son JUICIOS CON TODO LO QUE conlleva
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